El atentado en contra del sistema masivo de transporte MEXIBUS en Ecatepec, da un fuerte grito de lo que sucede en nuestra entidad en materia de seguridad.
Han pasado los años en torno al modelo de la policía estatal, después de casi una década la otrora policía donde Un helicóptero de la Dirección General de Seguridad Pública y Tránsito (DGSPT) se desplomó sobre las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México, causando la muerte de los seis pasajeros, entre ellos el director general de Seguridad Pública y Tránsito, Hugo Piña Luna, quien salió proyectado de la unidad. Las otras cinco personas murieron calcinadas en el interior del artefacto.
Hasta hoy no se determinan las causas del accidente, pero se presume que fue una falla mecánica, ya que el helicóptero Relámpago Uno, matrícula XCJCF, Bel 206, apenas había despegado cuando a una altura de ocho metros se precipitó y, al caer sobre el edificio, estalló en llamas era el 6 de marzo del año 2000 ahí fallecieron el director de Seguridad Pública y Tránsito; la subsecretaria de Gobierno, Olga Navarro Regordeta; Carlos Rosales, asesor de la Subsecretaría de Desarrollo Político; el piloto Mauricio Lechuga y el radio operador Rubén Campirán.
Esos hechos lograron que la policía estatal fuera vista como un semillero de corrupción donde el cambio de mandos era un tema obligado, sin embargo la corporación fue migrando a un tema político electoral más que a su conformación como una corporación confiable.
Wilfrido Robledo se encargaría de la transformación a la ASE la corporación que cambiaría los estándares que tendría la prevención del delito y la conducción sin embargo , al iniciarse la era Robledo después de la era Iriarte la conducción de la policía no cambio mucho se buscó la profesionalización de los mandos y con ello institucionalizar su permanencia por más de una década de los mismos comandantes y jefes en una especie de cofradía , dirigida por el pilar principal de las acciones de corrupción y quien mantiene hasta hoy el control de la secretaria el director operativo de clave Torre Rogelio Cortes.
Al encabezar la ASE Wilfrido Robledo presiono al entonces gobernador Peña presionó para que se hiciera uso de la fuerza, amenazando con renunciar a su cargo, si no se le permitía Peña Nieto accedió. La reacción gubernamental, por supuesto, derivó en una brutal y desmedida represión ejecutada por tres mil policías federales, estatales y municipales contra unos 300 “macheteros” el 4 de mayo del 2006, que resultó en 212 detenidos, los cuales, fueron golpeados y torturados física y psicológicamente.
Al arribar a la Era de David Garay las cosas no cambiaron y por demás es mencionar que los mandos seguirían siendo los mismos, la transformación de ASE a secretaria de seguridad ciudadana SSC donde se agrupaban tránsito, seguridad pública protección civil y áreas nuevas de inteligencia y robo de vehículos solo incrementaron la corrupción al interior de la corrupción, hoy de Roció Alonso a Damián Canales incondicional de Osorio Chong las cosas no han mejorado.
Lo ocurrido en el Mexibus en Ecatepec es según un portal de noticias asunto de una secta buscando reivindicaciones en el uso de transportes masivos, sin embargo en nuestro estado desde el caso piña en el sexenio Montiel no teníamos un atentado.
Y menos uno donde los cuerpos policiacos estatales no estuvieran cercanos o no supieran lo que sucedió habrá que recordar que la CUSAEM es la encargada de la seguridad de la línea 2 del mexibus y que todavía no está instalado el sistema de videoviligancia en esta línea.
Editorial de Vinculación Social
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